El subviraje, al igual que el sobreviraje, es un fenómeno al que debemos estar muy atentos cuando estemos conduciendo. Es muy, muy peligroso ya que nos puede ocurrir en cualquier momento y puede causar graves consecuencias. Si no sabes de qué estamos hablando, no te preocupes, al final de este post serás un experto en subviraje, sabrás qué es y cómo actuar si se da este fenómeno.
Antes de nada es importante que sepas que el mejor consejo que te podemos dar es que nunca te confíes, da igual si tu coche tiene tracción delantera o tiene toda su fuerza en las ruedas traseras. El ir siempre pendiente de todo es el punto más notable.
¿Qué es el subviraje?
El subviraje es un fenómeno que puede suceder mientras se conduce un vehículo y consiste en que el giro real del automóvil sea peligrosamente menor al que en realidad debería ser. Esto ocurre debido a que no siempre la posición de las ruedas delanteras delatan el giro que el vehículo en cuestión trazará, sino que existen diferentes factores que, como veremos, pueden arruinar la trayectoria de giro.
En una situación de subviraje, la parte delantera del vehículo tenderá a salir hacia el exterior de la curva. Esto se debe a la pérdida de adherencia del tren delantero y es un fenómeno típico de los vehículos de tracción delantera. El subviraje también es conocido como «irse de morro».
Causas del subviraje
El subviraje es mucho más común que el sobreviraje, quizás porque hay muchos más coches con tracción delantera que vehículos con tracción trasera, o quizás por nuestro modo de conducir, la mayoría de los grandes fabricantes de automóviles incluyen ayudas a la conducción para evitar y corregir situaciones de subviraje.
El problema más común en los casos en los que se produce este fenómeno es la velocidad y la inercia con la que el conductor entra a una curva. También suele ser muy común, sobre todo en conductores inexpertos, acelerar en mitad de una curva, produciéndose entonces una situación de subviraje que puede resultar fatal. Que los neumáticos no estén en buen estado, que estén con una presión que no es la recomendada, que la calzada no tenga un suelo uniforme, o que haya elementos en el trazado que puedan dificultar el agarre de las gomas (agua, grava, arena, etcétera), son otros de los muchos factores que pueden ser causantes de una pérdida del control del vehículo en una curva, conocida esta como subviraje.
¿Cómo corregir el subviraje?
Al igual que sucede con el sobreviraje, pisar el pedal de freno bruscamente es el error más grave que podemos cometer ya que solo conseguiremos aumentar el efecto del sobreviraje. Lo que tampoco debemos hacer es acelerar bruscamente para intentar salir de la dramática situación que supone la pérdida del control del coche en una curva.
Lo que si es aconsejable es levantar el pie del acelerador cuando empecemos a tomar la curva y notemos que perdemos la adherencia del eje delantero, este acto será clave para iniciar la recuperación del control del automóvil. La dirección ha de ser tratada con la máxima suavidad posible, evitando los giros bruscos y volantazos.
Por último, para tratar de volver a tener el control total sobre el automóvil, es de máxima importancia reducir la alta velocidad e inercia que nuestro automóvil tiene en la curva. Esto se logrará apretando el freno de una forma muy ligera pero continua o con ligeros toques sucesivos a este pedal. Este paso es muy importante y debemos hacerlo tanto si contamos con un sistema de bloqueo ABS como si no.