Necesitas una contraseña wifi segura. Todos hemos usado alguna vez una red wifi sin contraseña y la calidad no ha sido la mejor. En cualquier caso, nuestra conexión, seguramente, no era la mejor. Y esto se debe a la baja calidad en el servicio de internet. Es por eso que suele sugerirse conectarse a redes wifi que tengan usuario y contraseña de acceso. Normalmente, viene por defecto y suele ser una combinación aleatoria de letras, números y símbolos. Sin embargo, se suele sugerir adptar las contraseñas wifi aún más y así hacerlas más difíciles de hackear.
Es por eso que merece la pena valorar otras opciones como cambiar la contraseña, el nombre de usuario y así fortalecer la seguridad wep en nuestra conexión a internet a través de la red inalámbrica. De esta manera, el cifrado wep será mucho más sólido y menos débil ante posibles ataques externos.
Pensar en nuevas contraseñas para redes wi fi depende, en gran medida, de combinar parte de nuestra fuerza bruta mental y unir códigos que podamos recordar fácilmente. Nuevos números de identificación. Así podremos acceder naturalmente a navegadores web y que nuestra seguridad en red sea potente.
Recomiendan ir al dentista una vez cada seis meses. Pues igual, aproximadamente, suele recomendarse ajustar la clave de nuestra red de internet. Nuestras recomendaciones:
Longitud para una contraseña wifi segura
Se sugiere utilizar una contraseña lo suficientemente extensa como para que su descubrimiento sea difícil, no solo por el contenido, sino por lo largo. De esta manera, será más seguro a la hora de copiarla, dado que lo compleja que sea, determinará su facilidad para copiar.
Aleatoriedad
Normalmente somos víctimas de hackers informáticos por poner muy fácil el trabajo a quienes quieren aprovechar de forma gratuita nuestra conexión. Lo común es usar palabras a las que se nos puede asociar demasiado, algo que dificultará que nuestra red fuese completamente segura. Se recomienda evitar el uso de palabras fáciles, con las que se nos vincule fácilmente o composiciones sencillas. Por ejemplo, no usar nombres propios, quitar datos evidentes como nombres de hijos o relaciones por el estilo. Siempre optar por datos aleatorios, como nombres de marcas, por ejemplo, o palabras curiosas. Además, mezclar números, símbolos, letras y el orden de la misma, ayuda mucho.
Sustitución
Usar contraseñas con palabras aleatorias ayuda mucho. Pero si algo hace que sea aún más difícil descifrar nuestra clave, es sustituir letras por números. Por ejemplo, la A por un 4; la L por un 1; o una E por un 3. Así, despistamos bastante y ayudaremos a fortalecer la seguridad de nuestra red. Eso sí, tratemos de aprender las contraseñas
Por ejemplo: “m3 gust4n 14s h4mburgu3s4s”
Hacer nuestra contraseña wifi segura es fundamental si queremos conseguir hacer privada la conexión. Y esto también implica usar códigos complejos y evitar cosas obvias como números en sucesión o palabras compuestas por letras continuas del teclado. Por ejemplo, evitar “qwertyuiop” o “123456789”. De esta forma daremos, al menos, un poco más de confianza a las claves de nuestro ordenador, red wifi o conexiones externas.
Siempre que necesitemos fortalecer la seguridad de nuestra red, podemos optar por algún generador aleatorio de claves. En internet hay un montón de webs que pueden proporcionarte una combinación de números, letras y símbolos. De esta manera, nos ahorraremos la parte complicada.