Cada día son más las variedades de coches que podemos encontrar en el mercado. Si nos fijamos en los coches que funcionan gracias al suministro de un recurso natural como es el gas natural, podemos diferenciar entre GNL (Gas Natural Licuado) y GNC (Gas Natural Comprimido). Estas dos variedades son el mismo material pero con un resultado final procedente de diferentes presiones, ya sea a baja temperatura o altas presiones. 

El gas natural es uno de los recursos naturales más limpios que podemos encontrar, y actualmente se usa para hacer funcionar a los coches como alternativa a la gasolina y gasóleo. Aunque todos son recursos procedentes de fuentes no renovables, el gas natural es mucho más ecológico de cara a cuidar el medio ambiente, por lo que el objetivo es intentar normalizar la venta de este tipo de vehículos.

Ventajas y desventajas de un coche de gas natural

Hay que tener en cuenta que el gas natural es un recurso enmarcado dentro de las fuentes no renovables, por lo que su uso a largo plazo es limitado. Esto es una de las principales desventajas de utilizarlo para hacer funcionar a los coches. También debemos analizar el precio de estos coches, ya que, al no estar normalizados todavía, su precio es bastante más elevado que los vehículos tradicionales. El objetivo es que dentro de unos años tengan un precio estándar y asequible para todas las personas. 

El gas natural es mucho menos contaminante que la gasolina o gasóleo, por lo que todos estos coches llevarán el distintivo “ECO”, lo que tiene una doble ventaja. Por un lado, estaremos contribuyendo al medio ambiente y a cuidar de nuestro entorno, y por otro lado, estas etiquetas nos permitirían entrar en las zonas de tráfico restringidas de las grandes ciudades. 

Los coches tradicionales no tienen ningún problema a la hora de ser recargados, puesto que podemos encontrar muchas gasolineras en territorio nacional a pocos kilómetros entre ellas. El problema que ocurre con el escaso número de puntos de recarga de gas natural que podemos encontrar en España. A día de hoy existen 89 estaciones de gas que funcionen en nuestro país, un número que está siendo ampliado desde el primer momento en el que estos modelos de coche vieron la luz. 

Si has decidido cambiar tu coche tradicional a un coche que funcione a través de GNL o GNC, a continuación te explicamos cómo puedes cargarlo:

Dónde y cómo recargar mi coche

Si has comenzado un viaje con tu nuevo coche de gas natural y todavía no tienes muy claro dónde hay un punto de recarga, deberás consultar un mapa de estaciones. Como ya hemos comentado, actualmente España cuenta con 89 estaciones de repostaje repartidas por todo el país. Una vez hayas seleccionado la opción más cercana, el acto del repostaje es muy similar al que se realiza en un coche de gasolina o gasóleo.

En primer lugar, una vez hayas llegado con tu coche al punto de recarga, deberás seleccionar la cantidad de gas natural que deseas repostar. A continuación se desbloqueará el mango que tendrás que introducir en el orificio del coche establecido para ello, para después volver a colocarlo en su sitio inicial. 

No podemos olvidar que el tiempo de repostaje es mucho mayor al que podemos estar en una gasolinera tradicional. El objetivo de las marcas de coche también está en reducir estos tiempos, con el objetivo de que este sea un punto positivo con el que se aumente la venta de los coches por gas natural.

Diferentes modelos en el mercado

Si finalmente vamos a comprar un coche cuyo funcionamiento sea a través del recurso del gas natural, deberemos valorar los diferentes modelos que se encuentran en el mercado para elegir siempre la mejor opción sin perder dinero. 

Entre las distintas marcas de coches que ofrecen estos vehículos está Audi, que ha sacado al mercado modelos como el “Audi A4 Avant g-tron”. Estos coches tienen en sus depósitos capacidad para GNC y gasolina, para que elijas cuál te conviene más en el momento en que vas a repostar. Lo mismo ocurre con Fiat y su modelo “Fiat Punto 1.4 Natural Power 5p”, o la empresa Seat y el “Seat Mii EcoFuel”

Cada una de las empresas de automóviles ofrece, por lo general, varios modelos de coches por gas natural. El precio de estos modelos dependerá de sus características personales así como del bagaje de la marca. Antes de hacernos con uno de ellos, habrá que haber analizado bien todas esas características, así como la proximidad de puntos de recarga.