La red eléctrica europea no ha dejado de evolucionar. Una red de electricidad o red eléctrica es, en esencia, una cadena interconectada entre sí cuyos objetivos principales son los de producir, transmitir y distribuir la electricidad a los usuarios. El proceso se desarrolla en este mismo orden. Así, las redes eléctricas suelen estar compuestas por tres elementos principales.
El primero, las plantas productoras de energía eléctrica a partir de combustibles fósiles (petróleo, gas natural, carbón, gas licuado del petróleo y biomasa) o no fósiles (energía solar, energía hidráulica, nuclear, etcétera). En segundo lugar, las líneas de transmisión encargadas de transportar la corriente eléctrica desde las plantas productoras a los hogares y fábricas. Y, por último, los transformadores, unos aparatos electrónicos que sirven para aumentar o reducir la tensión de un circuito eléctrico. De esta manera, las líneas de transmisión son capaces de distribuir la corriente continua sin ningún problema.
Si quieres conocer cuál es la historia de la Red Eléctrica Europa (REE), sus principales características y objetivos principales, y las modificaciones que ha sufrido en los últimos tiempos, continúa leyendo. No te pierdas ningún detalle sobre la energía eléctrica que llega a tu hogar.
Historia general de la Red Eléctrica Europea
La Red Eléctrica Europea (REE) irrumpió en el panorama en el año 1.750 aproximadamente, en tiempos de la Revolución Industrial. En un principio, se componía de pequeñas redes individuales que proporcionaban corriente eléctrica a una región pequeña como un pueblo o una comarca. Pero, con el paso de los años, todos esos pequeños sistemas fueron conectándose entre sí hasta crear la gran red que es hoy en día.
Fue el físico, ingeniero e inventor norteamericano de origen serbocroata Nikola Tesla quien, ya bien entrado el siglo XX (20), inventó el primer sistema que proporcionaba corriente eléctrica. Para ello utilizó las redes virtuales para la iluminación. Por este motivo, la Red Eléctrica Europea que conocemos hoy en día sienta sus bases en los inventos de este gran genio.
Producción, transmisión y distribución de la energía eléctrica
Como hemos explicado en la introducción, la REE se encarga de producir, transmitir y distribuir la electricidad a los hogares de todo el continente. De todos estos procesos son responsables las empresas distribuidoras de electricidad (Naturgy, Iberdrola, Endesa, Repsol; etc.). Así, la repartición de electricidad desde las plantas generadoras consta de 2 fases claramente diferenciadas.
La primera fase consiste en la distribución de la electricidad desde las plantas de transformación hasta las fábricas transformadoras de distribución. La segunda fase, por su parte, consiste en finalmente distribuir la electricidad a las ciudades, fábricas, hogares, tiendas y centros de consumo.
Red Europea de Gestores de Redes de Transporte de Electricidad
La Red Europea de Gestores de Transporte de Electricidad (REGRTE) es la asociación que se encarga de transmitir la electricidad a gran escala en Europa. Fue fundada el 19 de diciembre del año 2008. Su ámbito de operación se extiende a los 27 países de la UE (Unión Europea) en su totalidad. El presidente actual es el italiano Daniel Dobbeni.
La forma legal de empresa es la de asociación internacional sin ánimo de lucro. Fue creada con la misión de cumplir una serie de objetivos. En primer lugar, promover los asuntos relacionados con el I+D (Investigación y Desarrollo) en el ámbito de la transmisión de energía eléctrica. Con su creación también se buscó garantizar la seguridad del suministro de corriente eléctrica y responder a las dudas, preguntas y consultas de los usuario. Además, se encarga de analizar las necesidades del mercado eléctrico y adaptarse a ellas de la mejor manera posible.
Modificaciones de la REE en relación con el medio ambiente
El año pasado (2019), la Unión Europea se puso como objetivo obtener el 30% de su energía eléctrica como mínimo a partir de fuentes renovables y ecológicas para el año 2030. Así se crearía una energía renovable y limpia para ofrecer al consumidor, y esto dio inicio al proyecto EU-SysFlex. Este proyecto buscará combinar de la mejor manera posible el buen servicio de distribución eléctrica y la responsabilidad climática.
Así, el EU-SysFlex tiene a largo plazo una duración de 4 años. En este momento se están realizando pruebas de replicabilidad, flexibilidad y escalabilidad del sistema de distribución eléctrica. Y uno de los objetivos es aplicar las últimas tecnologías al sistema, entre muchos otros. Así que habrá que estar atentos a cómo avanza el proyecto en los próximos meses.
La red eléctrica europea lleva años en una potenciación del sistema e impulso de nuevas infraestructuras. Estas permitirán facilitar las interconexiones en espacios nuevos y más distantes. Es por esto que la Comisión Europea ha trabajado insistentemente en su financiación. Además, pretende garantizar que en la próxima década este sistema haya sido implementado por completo. Y, de esta manera, promover nuevas tecnologías que faciliten su desarrollo.