Que una gran parte de la sociedad ha dejado atrás la televisión convencional y se ha pasado a la TV en streaming es un hecho. Todos hemos notado cómo las series de las plataformas de pago se instauran poco a poco como el tema principal de muchas de las conversaciones que tiene la gente. Este es un claro indicio de que la industria del streaming está en auge y sigue creciendo pero, ¿sabemos qué impacto medioambiental tiene?
En este artículo vamos a analizar algunos aspectos como la cantidad de energía que se consume a causa de los videos bajo demanda, sus emisiones, etc. con el fin de considerar cuál es su impacto en el medio ambiente. Si estás interesado, presta atención.
¿Tiene la TV en streaming un impacto medioambiental negativo?
Sentimos decir que las plataformas en streaming sí tienen un impacto medioambiental negativo. Esto se debe a que el consumo de energía por parte de las compañías tecnológicas a la hora de ofrecer sus servicios es realmente elevado.
Un estudio llevado a cabo por The Shift Project ha puesto de manifiesto que el consumo de datos es la causa de la mitad del impacto global de la tecnología digital, puesto que las tecnologías digitales producen alrededor de un 4% de las emisiones de carbono a nivel planetario y, entre centros de datos, infraestructura de red y terminales, consumen el 55% de la energía.
¿Puede suponer un problema a mayor escala?
El mayor problema en este momento es que el volumen de datos sigue creciendo, y lo hace de forma cada vez más acelerada. De todo el consumo de datos, solo un 20% está ligado al correo electrónico, mensajería instantánea, videojuegos, almacenamiento de imágenes, etc. El 80% restante se corresponde con el consumo de videos online.
En el año 2018 este consumo de vídeos produjo más de 300 millones de toneladas de dióxido de carbono, lo que supone un 1% de las emisiones totales del mundo. Todo esto se traduce en el agravio del efecto invernadero.
Estudios han demostrado que la reproducción de un video de unos 30 minutos en la famosa plataforma Netflix emite aproximadamente 200 gramos de CO2. Puede que este dato no nos diga mucho en un primer momento, pero cuando nos informan de que dicha cantidad equivale a circular una distancia de 800 metros en nuestro coche, la cosa cambia.
¿Cuál es la solución?
Lamentablemente nosotros no tenemos la solución al problema. El consumo de contenidos audiovisuales en las plataformas estaba creciendo cada año un poco más, pero estos últimos meses, a causa de la pandemia, el tráfico generado ha aumentado de forma exponencial.
Frenar el consumo de contenidos en streaming y a la carta es algo que parece totalmente imposible en este momento, justo cuando este tipo de plataformas se encuentran en pleno auge.